miércoles, 25 de marzo de 2009

FRACASO


FRACASO


sí. Graaan fracaso.


Hoy he pasado el día fallando en todas y cada una de las cosas que me proponía.

El viaje a la mierda, las vacaciones a la mierda, el proyecto a la mierda...
No creo que pueda estropear nada más. O si, la vida siempre me depara gratas sorpresas.



También he ido a mi médico de cabecera.
Ya sabía yo que su amabilidad e interés no podía durar mucho. Se ha cansado, como todos los que me rodean. Está harto de mis plantones, de que pida cita y acabe no yendo, de que le cuente siempre lo mismo... Y es normal.
Yo también estoy harta de mi, de estar tan lejos de todo y de todos.



A veces siento que no puedo más. Y no se porqué, pero cada día me levanto y sigo adelante. Supongo que en el fondo quiero demostrarme a mi misma que todavía soy capaz. Que soy capaz de controlarme. Que soy capaz de cambiar.
No sé si me lo quiero demostrar a mi misma, o al resto de gente. No paro de imaginar lo diferente que sería mi vida si estuviera delgada. Lo diferente que me mirarían los demás. Ahora toda esta capa de grasa me oprime, y siento que por culpa de estos kilos nadie puede llegar a mi, que son un freno, una inmensa barrera.



Gorda.




Siempre lo mismo.
Cada día de mi vida soñando con ser delgada. Soñando con que todos me quieran. Soñando con los sueños. Soñando despierta, y soñando dormida.

Toda mi vida lo mismo.
¿vida? ¿es que esto es vida?
Hoy estoy terriblemente decepcionada. Porque el médico ya no me hace ni caso. Mi familia me da por perdida. Y yo cada día más triste y más sola. Más angustiada.

Ya sé que cada día pongo lo mismo, pero es lo que me sale.




En algún momento pensé que dentro de unos años leería este blog y me reiría de lo estúpida e infeliz que fui. Ahora mismo no creo que eso vaya a suceder. Miro hacia delante y no veo nada. Sólo cifras que me torturan, en mi cabeza el deseo de ser mejor, y la conciencia de
querer librarme de este cuerpo

.

Pero no lo consigo.



Quiero volar, quiero ser pequeña y frágil, pero cada día me parece más difícil.



No comer no es complicado, pero esperar a ver los resultados sí lo es. Me impaciento. Me incomoda estar tan gorda. Es como si me hubiese despertado de repente y me hubiese dado cuenta de que soy un monstruo. Algo así ha sido. No sabía que era tan horrible. Pero me encontré con una báscula y un espejo, y todo volvió a cambiar de nuevo.

Necesito respirar. Necesito resultados.



Un día más, confusa, cansada y asustada.



¿y mañana?


Eso es lo peor. Que sé que habrá un mañana, que me levantaré, me pesaré, me enfadaré, me insultaré...

Ya sé lo que va a suceder.
Y no me gusta. ¡¡ No me gusta nada!!

Pero por otra parte sé que no existe la magia, y para recuperar el cuerpo que tenía antes necesito tiempo, mucho tiempo. No tengo paciencia, soy incapaz de esperar cinco minutos el autobús, y ahora tengo que esperar meses...

Ojalá pudiese tener YA resultados. Ojalá consiguiese ser feliz.


Bueno, quien sabe, quizás mañana sea un buen día...








sálvese quien pueda...


...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Yo sola no puedo...
¿Me ayudas?